Siempre que doy inicio a una auditoria o una inspección, si es la primera vez que voy a una planta me tomo el tiempo para explicarle a los auditados que las auditorias e inspecciones son: «Oportunidades de Mejora» Cuando algunos ojos externos a la empresa o al área vienen a realizar una auditoria tenemos la oportunidad de que vean, lo que nuestros ojos acostumbrados al día a día y a la rutina ya no pueden ver.
No obstante a eso, la mayoría de las personas perciben las inspecciones como fiscalizadoras, y piensan que el auditor solo viene a decirnos lo que tenemos mal. Por esa razón también, cuando hago inspección, tal como aprendí de AIB voy con una visión de educadora.
Hoy AIB nos recuerda que debemos tomarnos el tiempo durante las auditorias de también observar y destacar aquellas cosas que observamos que están bien hechas. Una de las cosas que hago como auditoria es pedirle que me dejen sacar alguna fotografía, si es permitido, para tenerla como modelo para otras plantas. A la mayoría de nosotros nos halaga que nos digan que alguna idea que desarrollamos es una «Buena Idea!!!»
La mayoría de nosotros cuando hacemos auto-inspecciones internas, hacemos un recorrido en busca de las personas que están «haciendo las cosas mal». Esto, naturalmente, provoca una «atmósfera» de percepción de la negatividad. Para cambiar esto y estar en consonancia con la política de AIB de ser «educadores» y estar allí para ayudar, hago lo siguiente:
A medida que avanza en torno a su inspección, tomamos el tiempo de observar algunas personas «haciendo las cosas bien». Por ejemplo, si los registros de los operadores están a tiempo y han sido verificados, si un determinado lugar de trabajo esta muy ordenado, tómese un segundo y dale a esa persona un apretón de manos y digale: «bien hecho» Parece que un pequeño gesto, pero tiene un gran impacto en la forma en que se reciba la auditoría.